La estadounidense Natalia Grossman volvió a terminar la última Copa del Mundo de Boulder de la temporada como la mejor y además coronó su victoria absoluta en la Copa del Mundo con la medalla de oro en Innsbruck. Pisándoles los talones estaba la alemana Hannah Meul, que ganó su segunda medalla de plata consecutiva. El podio lo completó la japonesa Miho Nonaka.